LA INQUISICIÓN, UNA INSTITUCIÓN MÁS POLÍTICA QUE RELIGIOSA

El objetivo principal de los tribunales del Santo Oficio no era la salvación de las almas pecadoras, ni la redención de los pobres reos, era impartir miedo. Un pueblo temeroso, era un pueblo obediente al poder establecido. Eran organismos políticos, mas que religiosos, inspirar terror entre la población fortalecía el poder establecido, el poder del rey, la nobleza y el alto clero. La clemencia, la misericordia o el perdón estaba ausente, muy lejos de lo que en teoría pregonaba el cristianismo. El terrorífico inquisidor Nicolau d'Eymeric (1) señalaba: "Hay que recordar que la principal finalidad del proceso y la condena a muerte no es salvar el alma del acusado, sino procurar "el bien público" e infundir terror al pueblo" El "bien público" no era el del pueblo y debía estar lejos de cualquier concepción caritativa, el bien público era el del poder establecido. En las actas condenatorias que se han conservado, podemos ver como clérigos, labradores ...